Manual de Prevención de Riesgos para el Costalero
Capitulo I.- Adaptación del costalero a los cambios sociales actuales.
Los cambios de las profesiones han dado lugar a un hombre del nuevo milenio sedentario, relevando el esfuerzo intelectual al desarrollo físico, encauzándonos a una sociedad más sedentaria. Aún así, la tradición del trabajo del costalero en España continúa inmutable en el tiempo.
Sigue siendo imprescindible la misma preparación física que la de nuestros antecesores cargadores "con el cuerpo hecho, trabajao". Los que procedían de las profesiones dedicadas a distribuir mercancías en los muelles, en los comercios. Trabajadores de las fundiciones, obreros portuarios, en general hombres acostumbrados a mover grandes pesos, como los describe Antonio Burgos "Estribadores del muelle de Sevilla, que cargaban pasos durante siete días y barcos durante el resto del año".
Dicha percepción y análisis del mundo del costal dio lugar al estudio científico creado en el año 2000 por la Colegiada del Ilustre Colegio de Fisioterapia de Andalucía, Montserrat Altemir Lara.. Este estudio titulado: "Prevención en el costalero, algias y lesiones más frecuentes en el costalero" fue avalado en todo momento por el Ilustre Colegio de Fisioterapia de Andalucía, lo que a su vez dio lugar a la creación del Centro de Atención del Costalero, durante la Semana Santa, con la colaboración del Área de Cultura y Fiestas Mayores del Ayuntamiento Hispalense. Igualmente tienen información detallada sobre este estudio en la web www.costalero.com.
-Resumen de los dolores más frecuentes en el costalero.
Son muchos los costaleros y familiares que se preguntan si es peligroso salir de costalero. La motivación del costalero es imprescindible para su trabajo pero no es suficiente para evitar lesiones. Gran numero de ellos han sufrido la mayor desgracia que le puede pasar a un costalero, dejar de sacar el paso. Como lo describe D. Emilio Velázquez Mijarra "Cuando la carrera se va haciendo larga las horas de brega en el paso y los kilos empiezan a caer por derecho, no ha de extrañar que uno de los costaleros se quede atrás en una levantá".
El problema no está en los kilos, ni en la mayor edad, si se adoptan medidas preventivas de educación y salud. La salud y tradición son compatibles. Podemos prevenir que un dolor agudo acompañado de una postura incorrecta con movimiento brusco, una condición de salud inconveniente, una preparación física impropia y unas medidas de actuación inadecuadas, origine una lesión.
Capitulo II.- Medidas a tener en cuenta en las posturas de los tres momentos de la "levantá" a pulso, "arriá" a tierra y salida o entrada de rodillas.
Medidas recomendadas en todas las Posturas.
Concentrarse en efectuar las posturas de forma correcta. Traccionar, tirar de la cabeza hacia el techo. Cuello recto. Meter la barbilla hacia dentro. A la vez que se coge aire por la nariz, extender el abdomen. Las articulaciones del codo y la muñeca no deben estar totalmente flexionadas. Columna lumbar recta. Contraer el abdomen "meter riñones". Bien liada la faja a la cintura. No inclinar el pie en el borde externo o interno, apoyar el peso por igual sobre la planta del pie.
Capítulo III.- Posturas recomendados.
Balance Correcto de la cabeza
Cuando la cabeza tiene la posibilidad de moverse hacia delante libremente la columna tiene la posibilidad de alargarse hacia arriba o hacia abajo. En cambio, cuando echas la cabeza hacia atrás, contrayendo el cuello, se crea un exceso de peso en la parte alta de la cabeza, de forma que el cuerpo tenga que hacer un esfuerzo extra.
Aprender a sentarse de forma cómoda y correcta.
Cuello relajado. Cabeza mirando hacia delante y hacia arriba. Hombros relajados y caídos. No colapsar el pecho. Sentarse sobre los huesos de los glúteos. Los pies sobre el suelo de la habitación
Llevar un peso en la posición adecuada.
Cuello relajado. Cabeza mirando al frente y tirando hacia arriba. Respirar hacia fuera. Doblar las rodillas.
Sentarse en el coche con la posición correcta.
Cuello relajado. Cabeza mirando hacia delante y tirando hacia arriba. No apretar las piernas. Respiración relajada y regular. Muñecas relajadas. Tobillos relajados.
Los ejercicios los encontrará en la Web www.costalero.com
-Recomendaciones Generales para el Costalero
· Pasar por una consulta médica dos o tres meses antes de Semana Santa. Recuerde que un diagnóstico a tiempo puede permitir dejarle disfrutar de su gozo.
· Pasar por una consulta de fisioterapia con objeto de prevenir posibles lesiones del aparato locomotor (musculatura y huesos). Se le analizarán los factores de riesgo de forma individual en cada costalero.
· Entrenarse físicamente y técnicamente para salir de costalero.
· Mejorar la coordinación y el equilibrio para que el trabajo físico sea lo más eficiente posible.
· Recuerde hacer todos los ejercicios lentamente y sintiendo la zona, en caso de molestia no hacer el ejercicio y dirigirse a un fisioterapeuta.
· Adoptar las posturas correctas al realizar las funciones cotidianas
· El tamaño y la posición de la morcilla debe proteger la séptima vértebra cervical, vértebra prominente que podemos tocar al final del cuello, siendo la zona de mayor esfuerzo.
· Protegerse con faja ortopédica lumbar y vendajes funcionales recomendados para su caso por el profesional fisioterapeuta. Evitar que se formen arrugas al aprisionar la faja.
· El calzado debe ser: alpargatas, reforzada con vendajes funcionales en los pies y tobillos. Zapatillas o botines, flexibles y cómodos.
· Mantener la mirada al frente durante el trayecto, evitando aumentar la curvatura del cuello.
· Mantener la espalda en posición recta.
· Al meter riñones: mantener la musculatura abdominal contraída para que realice función de faja muscular.
· Antes de sacar el paso y durante los relevos realizar los ejercicios indicados posteriormente.
· Beber agua en pequeñas cantidades y de forma continuada durante el trayecto.
· Después de sacar el paso realizar ejercicios de estiramiento.
· Quitar la faja lentamente.
· Si siente dolor intenso y duradero del aparato locomotor, diríjase a un diplomado en fisioterapia.
· No dejar de visitar al médico en caso de dolencias persistentes.
ESPERAMOS QUE LE SEAN ÚTILES ESTOS CONSEJOS.
BIBLIOGRAFIA: MONTSERRAT ALTEMIR LARA