A MANOLO MAURI
Desde el pasado viernes día 17 tengo necesidad de escribir y la verdad es que no sé cómo comenzar. Pero sé que mientras no lo haga no me quedaré tranquilo conmigo mismo, ya que esa mañana recibo una llamada que al escuchar quién la hacía, porque reconocí la voz, el corazón me dio un vuelco, cuando me dijo que mi amigo y hermano había fallecido.
No me lo quería creer porque estaba perfectamente enterado de la operación que le habían hecho y su post-operatorio, que siendo no muy rápido, tampoco nos hacia presagiar el fatal...