
Me lo dijo ese monstruo de capataces que fuera Manolo Bejarano y
lo corroboran los que son algo en el mundo de las trabajaderas:el
costal, cuanto menos lo toques mejor. Una vez que unas manos expertas
hayan hecho la ropa y ésta quede en su lugar tras las primeras
chicotas, ya saben, ni tocarla.
Tengo en mi mente una
foto de recuerdo y que me...