Luis Merello Govantes, nacido en El Puerto de Santa María (Cádiz) en 1947, lleva más tiempo en Los Palacios y Villafranca que en ningún otro sitio. El jueves se cumplieron 25 años exactos desde su nombramiento como párroco del Sagrado Corazón de Jesús, y fue el protagonista de un acto institucional en el que se nombraba Hijo Adoptivo de este pueblo en el que todos lo aprecian.
"Desde siempre me he sentido muy palaciego y siempre he sido un gran defensor de este pueblo", dijo Luis el cura o don Luis, como se conoce al párroco del Sagrado Corazón en cualquier rincón del municipio, incluso más allá, en los poblados de colonización a los que aterrizó en 1973, en cuanto fue nombrado sacerdote. Ninguno de los centenares de personas que abarrotaban el salón de plenos del Ayuntamiento de Los Palacios y Villafranca pensó lo contrario. Por eso el pleno, hace un par de semanas, a propuesta del propio consejo parroquial, aprobó casi por unanimidad (a excepción de IU-IP, que se abstuvo) la concesión del título a este cura sin alzacuellos, pateador incansable de las calles, amigo de todos, de los que van y de los que no van a misa.
"He cumplido con mi obligación", añadió a las palabras de reconocimiento que le dirigió el alcalde, Antonio Maestre (PSOE), quien resaltó que "desde su vocación sacerdotal es un ejemplo de integración en nuestra vida social y de compromiso con el pasado, el presente y el futuro de nuestro pueblo", al tiempo que destacó "su integridad, su tolerancia y su solidaridad, referentes para numerosas personas que han encontrado en su amistad y su labor pastoral el apoyo de alguien cercano".
En el acto se proyectó un documental sobre su vida y firmó en el Libro de Honor del Consistorio, recibió el título de Hijo Adoptivo y el Pin de Oro de la Ciudad. Se mostró especialmente agradecido a "tanta gente que me ha mostrado su cariño estos días".
Don Luis estudió en los Salesianos de Utrera y se forjó como cura en Sevilla, pero fue en Los Palacios y Villafranca donde comenzó su andadura como cura del pueblo, sobre todo desde que en 1985 dejó Maribáñez para ser destinado a la parroquia del Sagrado Corazón de Jesús. El templo era tan pequeño que tres años después comenzó la aventura para la construcción de la magnífica iglesia actual para lo que organizó mil y una rifas. En estas últimas décadas, el pueblo ha crecido tanto que los 20.000 feligreses sobrepasaban con mucho las posibilidades administrativas de una sola parroquia, por lo que ha vuelto a ser don Luis el verdadero impulsor de la tercera parroquia, la de El Buen Pastor.
Fuentes :Correo de Andalucía.(Alvaro Romero).
14 Octubre 2010
14 Octubre 2010
