La última vez que la Virgen salió por su aldea vestida como en esta madrugada, con esa peculiar impronta decimonónica que
le confieren las ráfagas “de pincho”, fue en 1906 y no en las
fechas de la Romería. Aquel año la Virgen del Rocío salió en el mes de
septiembre en procesión extraordinaria –la primera documentada en su
historia– en desagravio por un escabroso suceso poco
mencionado en la bibliografía rociera: la muerte a puñaladas de
un hombre en el interior del santuario el 18 de agosto,
coincidiendo con las celebraciones del Rocío Chico.
Sin varales ni palio, mostrándose exenta sobre la peana plateada de su paso procesional, la Virgen del Rocío lucirá esta noche el traje denominado de los Montpensier y la ráfaga “de pincho” en plata, a juego con la corona y la media luna, que datan del siglo XIX. Además, se presenta adornada con flores de talco, complemento propio de la estética iconográfica del siglo XIX, y que se prolongó hasta las primeras décadas del XX.