... y me nutro de tu palabra y creo en tu evangelio y recuerdo que de polvo vengo y en polvo me he de convertir y me alimento de tu evangelio para llegar limpiamente a la meta de esta peculiar romería de 40 días de camino, que culminan en un domingo de palmas y ramas de olivo, de niños inocentes portadores de un cirio, para iluminar tu entrada en nuestro pueblo, tu entrada entre nosotros, y con la ayuda de un ángel del cielo, impregnas nuestras calles entre incienso y sonrisas infantiles.
Y cuando anocheciendo en el barrio de la almazara veo el primer varal de tu palio, que parece que en carreta de plata con campanillas vienes sonando, reviras en la esquina de Avd. de Utrera y Menéndez Pelayo, se clava tu mirada en la mía, y dime quien se resiste a alzarte mi cante hecho oración, he aquí mi primera saeta de la Semana grande...
Extracto del Pregón Rocío 2014. Isa Amador